Aparición de celulitis y retención de líquidos por la menopausia

La menopausia conlleva cambios hormonales que afectan la piel y el cuerpo de la mujer, dando lugar a la aparición de celulitis y la retención de líquidos. Estos síntomas pueden reducirse mediante una adecuada nutrición, ejercicio y tratamientos estéticos profesionales.
Aparición de celulitis y retención de líquidos por la menopausia
La menopausia conlleva cambios hormonales que afectan la piel y el cuerpo de la mujer, dando lugar a la aparición de celulitis y la retención de líquidos. Estos síntomas pueden reducirse mediante una adecuada nutrición, ejercicio y tratamientos estéticos profesionales.

La menopausia es un momento en el ciclo reproductivo de la mujer definido como doce meses consecutivos sin menstruación. Se produce de forma gradual y natural cuando el organismo deja de producir hormonas femeninas y los ovarios cesan su función.

Durante los años previos a este punto, conocidos como perimenopausia, se producen fluctuaciones y desequilibrios hormonales que contribuyen a la aparición de la celulitis y a una mayor tendencia a la retención de líquidos, algo que puede incluso agudizarse durante primeros años tras la menopausia.

Causas de la aparición de celulitis y retención de líquidos durante la menopausia

La menopausia afecta a las mujeres de muchas formas, y la aparición o empeoramiento de la celulitis es solo una de ellas. La caída de las hormonas, especialmente del estrógeno, puede alterar los mecanismos que regulan el equilibrio de los fluidos y su eliminación. 

Una gran afectada por la falta de hormonas es la síntesis del colágeno, lo que se traduce en una menor elasticidad de los tejidos y una mayor flacidez, permitiendo que los adipocitos subcutáneos se vuelvan más pronunciados. Además, esta falta de elasticidad también afecta a los vasos sanguíneos y linfáticos, y una mala circulación puede contribuir decisivamente a que se produzca la retención de líquidos y se desarrolle la temida celulitis.

Por otra parte, la composición del organismo también cambia, ya que en esta etapa de la vida el porcentaje de tejido adiposo suele aumentar en relación con la masa magra, provocando que la celulitis sea incluso más visible.

Síntomas principales

Hinchazón

El síntoma más prominente de la retención de líquidos es la hinchazón, que puede ser generalizada o localizada en zonas del cuerpo como la cara, el abdomen, los brazos, las piernas, los pies y los tobillos. Esta hinchazón está provocada por la acumulación de agua en los tejidos.

Aumento de peso

La acumulación de fluidos suele ir acompañada de un aumento de peso, por lo que la retención de líquidos no solo se observa en la figura, sino también en la báscula.

Piel de naranja

Una de las causas de la aparición de celulitis es la retención de líquidos, así que ambos fenómenos van a menudo de la mano. Entre los síntomas más visibles de la celulitis está la antiestética piel de naranja, especialmente en piernas y glúteos, aunque también puede aparecer en otras partes del cuerpo, como los brazos.

Tratamientos para la celulitis y la retención de líquidos

Preguntas frecuentes

Una dieta saludable y variada que no abuse de la bollería, los alimentos ultraprocesados y los platos precocinados es siempre una buena opción. Incorporar a la dieta frutas y verduras diuréticas como piña natural, melón, lechuga, espárragos, alcachofas o pepino pueden ayudar a perder líquido y peso. Si además añadimos proteínas animales o vegetales de buena calidad y reducimos nuestra ingesta de sal y alcohol, obtendremos una nutrición ideal no solo para combatir la retención de líquidos y la celulitis, sino para perder grasa en general y mejorar nuestra salud.

Por último, un punto importante a tener en cuenta es que la retención de líquidos no implica que estemos tomando demasiada. Todo lo contrario, es muy posible que la deshidratación lleve al organismo a reaccionar acumulando líquido. Por lo tanto, beber la cantidad de agua suficiente es realmente importante, hágalo sin miedo.

El ejercicio resulta muy beneficioso durante la menopausia, especialmente si combinamos ejercicios de fuerza y cardio, pero la respuesta de la celulitis al mismo depende del tipo de celulitis al que nos enfrentemos. La celulitis más rebelde y dura puede que permanezca sin cambios incluso con ejercicio, y hasta que paradójicamente sea más visible al perder grasa y líquido, pero la celulitis blanda y la edematosa suelen responder bastante bien.

Son especialmente recomendables las sentadillas y los lunges, sobre todo si añadimos algo de peso, y también el ejercicio con bandas elásticas para tonificar y endurecer los músculos. Las planchas y las abdominales son excelentes para tonificar los brazos y fortalecer el core, respectivamente.

El mercado está lleno de productos que prometen mejorar la apariencia de la celulitis, pero la mayoría no dan los resultados esperados porque, aunque las cremas y los geles pueden mejorar la apariencia de la piel de forma notable, realmente no penetran más allá de la epidermis y no alcanzan el tejido adiposo. Por lo tanto, es mejor que la aplicación tópica de estos productos cosméticos sea realizada de forma profesional mediante el masaje y las maniobras adecuadas. De esta manera, conseguiremos movilizar el sistema linfático para eliminar grasa y fluidos, logrando unos resultados óptimos.

Otros dos tratamientos profesionales ampliamente utilizados para combatir la celulitis son la radiofrecuencia, que logra alcanzar el tejido adiposo mediante ondas electromagnéticas, y la mesoterapia, que con sus microinyecciones atraviesa la barrera cutánea para llevar los principios activos directamente a las capas más profundas de la piel.