La sequedad vaginal es uno de los síntomas más comunes en la menopausia. La causa es el descenso de estrógenos que se produce en esta etapa, que provoca una disminución de la lubricación natural de esa zona.
También puede aparecer en caso de fallo ovárico precoz o tras un tratamiento oncológico, durante la lactancia y en situaciones de estrés. El uso de anticonceptivos, la toma de algunos medicamentos o infecciones puntuales son otros factores que pueden provocarla.
En cualquier caso, y sea cual sea la causa, hay solución. Pero solo un 25% de las mujeres lo consultan, y a menudo no se le da mucha importancia a no ser que se acompañe de otras molestias como picor, escozor, cambios en las secreciones de la zona vaginal, dolor o dificultades para mantener relaciones sexuales, ya que la sequedad puede provocar irritación y ardor por la fricción. Sin embargo, es importante tratar este problema, ya que además de esas molestias puede favorecer la aparición de infecciones urinarias de repetición y suele agravarse con el tiempo.
Tratamientos para la sequedad vaginal
Se pueden usar cremas hidratantes o recurrir a la aplicación local de estrógenos. En casos difíciles o si la paciente prefiere una terapia no hormonal, la medicina regenerativa ofrece otras opciones.
Preguntas frecuentes
A menudo, la sequedad vaginal es un problema derivado de la atrofia vaginal, pero no todas las mujeres que tienen atrofia notan sequedad. ¿Por qué?
Porque depende del grado de atrofia. La atrofia vaginal afecta a la piel, que se vuelve más delgada y fina, pero no siempre provoca picazón o escozor. Sin embargo, con el paso de los años va a más, por eso es importante hacer un seguimiento.
¿Es conveniente utilizar algún producto de higiene íntima específico para la sequedad vaginal?
No, a no ser que te lo indique tu ginecóloga/o. Lo que sí que se recomienda es evitar los baños y lavados frecuentes y utilizar jabones de pH neutro.
¿Puedo utilizar lubricantes comerciales para mejorar las relaciones sexuales?
Depende del grado de sequedad. Si no te provocan molestias, sí. Pero lo mejor es consultar siempre a un experto.
¿Qué tratamientos naturales, si los hay, pueden ayudar a combatir la sequedad vaginal?
Sí los hay. Existen productos tópicos que pueden ayudar a aliviar la incomodidad, como las cremas hidratantes que contienen ácido hialurónico, aceites naturales, caléndula y aloe vera. También se recomienda seguir un estilo de vida saludable y consumir alimentos ricos en bacterias que cuidan la microbiota intestinal y vaginal.
Una vez aparece la sequedad vaginal ¿hay que seguir un tratamiento de por vida?
Sí, aunque hay múltiples opciones de tratamientos y también se pueden combinar entre sí. Pasados los primeros 10 años tras la menopausia no están indicados los tratamientos hormonales, porque los riesgos superan a los beneficios potenciales. Si el tratamiento hormonal es de aplicación a nivel local, no tiene apenas efectos sistémicos, por lo que se puede alargar en el tiempo.
