Introducción
El porcentaje de embarazo se sitúa entre el 20 y el 25% por ciclo de tratamiento.
La mayoría de los embarazos se producen en los tres primeros ciclos de inseminación aunque factores como la edad de la mujer y la posible existencia de otras causas que afecten su fertilidad pueden demorar el éxito del tratamiento un poco más.
La inseminación artificial con semen de donante es una técnica de reproducción asistida (TRA) que está indicada en:
- Parejas que presentan una alteración grave o irreversible del semen.
- Parejas en las que el marido presenta un riesgo de transmitir alguna enfermedad a su descendencia.
- Mujeres sin pareja masculina que desean un embarazo.
La selección de los donantes de semen es competencia de los Bancos de Semen. Antes de ser aceptado los donantes son sometidos a un riguroso examen con el fin de evitar la posible transmisión de enfernedades a la descendencia. Este examen incluye, además del estudio de semen (seminograma), un estudio genético (cariotipo) y un estudio de enfermedades infecciosas (hepatitis, sífilis, sida...).
Generalmente se realizan hasta seis ciclos de inseminación. Cuando un ciclo no tiene éxito es importante revisarlo y realizar los cambios necesarios (variar la dosis, controles más estrictos...). Si aún así no se logra el embarazo debe considerase la posible existencia de otras anomalías y/o la conveniencia de recurrir a otras técnicas de reproducción asistida. (TRA).
En algunos casos es aconsejable recurrir a un tratamiento estimulador de la ovulación con comprimidos orales o inyecciones subcutáneas (inducción de la ovulación) con el fin de asegurar que la ovulación se produce correctamente. Estos tratamientos, aunque pueden producir algunas complicaciones, pretenden asegurar que la ovulación se produce correctamente con el objetivo de aumentar las posibilidades de conseguir el embarazo.
Requisitos previos necesarios para realizar la inseminación
- Exploración ginecológica completa.
- Estudio complementario para descartar cualquier patología asociada que dificulte o impida el embarazo.
- Determinar el donante que mejor se ajusta a las características físicas (raza, color de ojos, piel, cabello y grupo sanguíneo) de la mujer y de su pareja.
¿En qué consiste la inseminación?
La inseminación consiste en depositar los espermatozoides en el interior del útero (inseminación intrauterina).
La inseminación artificial intrauterina es una técnica sencilla, rápida (dura escasos minutos) y prácticamente indolora. Se realiza en la misma consulta y no son necesarios ni el ingreso en clínica ni la anestesia.
Una única inseminación por el ciclo es suficiente si se realiza en el momento adecuado; es decir, en el momento de la ovulación. Para ello es imprescindible proceder a una serie de controles de ovulación con ecografía y análisis de orina o sangre que permiten determinar el día de la ovulación con la máxima exactitud.
Muestra de semen
Las muestras de semen de donante del Servicio de Medicina de la Reproducción de Salud de la mujer Dexeus proceden de Bancos externos acreditados con los que se ha establecido un convenio de colaboración.
Los candidatos a donantes de semen son sometidos a un riguroso examen con el fin de evitar la posible transmisión de enfermedades a la descendencia. Este examen incluye, además del estudio de semen (seminograma), un estudio genético (cariotipo) y un estudio de enfermedades infecciosas (hepatitis, sífilis, SIDA...).
La selección de los donantes de semen se realiza de acuerdo a las características fenotípicas e inmunológicas de las mujeres receptoras (grupo sanguíneo y Rh, peso, talla, color de ojos, pelo etc.).
Los datos del donante y de la mujer receptora se mantienen custodiados en el centro en estricto anonimato.
El día de la inseminación se descongela la muestra de semen de donante y se prepara en el Laboratorio de Andrología. Una concentración de estos espermatozoides (0.2ml) se utilizará para la inseminación depositándola en el interior del útero de la mujer.
Después de la inseminación
Después de la inseminación la mujer permanece en reposo durante 10-15 minutos. Ese día se recomienda una vida tranquila sin baños de inmersión ni relaciones sexuales. Al día siguiente puede reiniciar su vida normal evitando grandes esfuerzos.
En ocasiones, en los días posteriores a la inseminación, se presenta alguna pequeña pérdida de sangre o algún ligero dolor abdominal que no tienen ninguna importancia siempre que sean de carácter leve.
Control de la ovulación
El objetivo del control de la ovulación es establecer con la mayor exactitud el día de la ovulación:
- Ecografía vaginal:
Sirve para observar los ovarios y comprobar el tamaño y ritmo de crecimiento del folículo que hay en uno de ellos (dentro del folículo está el óvulo). El folículo aumenta de tamaño a medida que va madurando. Se considera maduro o preparado para ovular cuando su diámetro alcanza los 18 milímetros como mínimo. - Análisis de orina:
Sirve para detectar el ascenso de la hormona LH, hormona que aumenta de forma brusca 24 horas antes de la ovulación. - Análisis de sangre:
Sirve para conocer el nivel de estrógenos (estradiol), hormona femenina que se produce en los ovarios y que aumenta a medida que el óvulo madura en el interior del folículo. Puede ser útil para valorar la respuesta cuando se realiza un tratamiento de estimulación de la ovulación.
El primer control se lleva a cabo entre 2 y 3 días antes de la supuesta ovulación. En cada control se fija la fecha del siguiente (diarios a partir de un tamaño folicular de 18 mm).
Suelen practicarse una media de 3 a 4 controles por ciclo. Entre el primer control y el día de la inseminación suelen transcurrir aproximadamente de 3 a 8 días.
En caso de administrar algún tratamiento de estimulación, se orientan los días de control y las dosis necesarias en función de la respuesta que se va observando en los ovarios.
La selección de los donantes de semen se realiza de acuerdo a las características fenotípicas e inmunológicas de las mujeres receptoras (grupo sanguíneo y Rh, peso, talla, color de ojos, pelo etc.).
Los datos del donante y de la mujer receptora se mantienen custodiados en el centro en estricto anonimato.
El día de la inseminación se descongela la muestra de semen de donante y se prepara en el Laboratorio de Andrología. Una concentración de estos espermatozoides (0.2ml) se utilizará para la inseminación depositándola en el interior del útero de la mujer.
Complicaciones
La inseminación artificial es una técnica que no está exenta de riesgos aunque todos ellos son generalmente controlables. La infección y las reacciones alérgicas a los componentes del semen son complicaciones excepcionales.
En este tipo de inseminación existen un riesgo de aborto espontáneo del 15% y un riesgo de embarazo extrauterino o ectópico (el embrión se implanta fuera del útero) del 1%.
En relación a los tratamientos estimuladores de la ovulación no hay evidencia científica de posibles efectos secundarios a largo plazo en la salud de la mujer. Sin embargo, existen dos riesgos importantes a corto plazo: el más frecuente es el embarazo múltiple (15-20%); el menos frecuente es el exceso de estimulación o hiperestimulación ovárica (1%). El número y tamaño de los folículos y el nivel del estradiol realizados durante los controles de ovulación permiten reconocer aquellos ciclos que tienen un mayor riesgo de hiperestimulación y de embarazo múltiple y que, valorando individual mente cada caso, puede ser conveniente cancelar.
Una vez conseguido el embarazo, los posibles riesgos para la madre o para el feto son los mismos que acontecen en un embarazo ocurrido de forma espontánea, a excepción de las complicaciones derivadas de un eventual embarazo múltiple, como son la prematuridad o el bajo peso al nacer.