ICSI
Qué es la ICSI
La ICSI, por sus siglas en inglés (Intra Cytoplasmic Sperm Injection) es una técnica utilizada en muchos de los tratamientos de fecundación in vitro. Consiste en la inseminación de un óvulo mediante la microinyección de un espermatozoide.
Los pasos previos y posteriores a la inseminación son los mismos que en una fecundación in vitro clásica. El óvulo se fecunda, se convierte en preembrión y se transfiere al útero para que continúe su desarrollo.
La ICSI nació en 1992 para tratar casos de esterilidad masculina como oligozoospermia (baja concentración de espermatozoides), astenozoospermia (baja movilidad) o teratozoospermia (pocos espermatozoides con la morfología adecuada), entre otros. Su aplicación viene determinada por el ginecólogo, andrólogo o embriólogo, dependiendo de las características seminales. También está indicada en casos de esterilidad sin diagnóstico o en fallos anteriores de fecundación.
Entre 2-4 horas después de la recuperación de los ovocitos, el embriólogo elimina las células foliculares que rodean a los ovocitos permitiendo así una observación más detallada de los mismos. Los ovocitos se clasifican según su grado de maduración y se guardan en placas de cultivo dentro del incubador. Únicamente los ovocitos maduros son microinyectados.
Una vez finalizado el proceso, los ovocitos se guardan en placas de cultivo debidamente identificadas, a 37º de temperatura y condiciones de humedad y gasificación apropiadas hasta el día siguiente, momento en el que el embriólogo controlará si se ha producido o no la fecundación.
Testimonios
Paula, Sant Cugat (Barcelona)
Mi pareja y yo decidimos visitarnos en Dexeus Mujer porque llevábamos más de un año intentando lograr un embarazo sin éxito. Yo tengo 34 años y el 39, así que nos extrañó. Nos hicimos un test de fertilidad de pareja y en mi caso todo estaba bien, pero en el análisis del esperma detectaron algún problema de movilidad que impedía concebir de forma natural. Así que nos aconsejaron hacer una FIV, para poder realizar la fecundación en el laboratorio mediante una técnica denominada ICSI, que consiste en introducir directamente el espermatozoide en el óvulo mediante una microinyección. Nos quedamos un poco preocupados, pero nos dijeron que había muchas posibilidades de que fuera bien, así que nos animamos. Tardamos unos cuantos meses más porque yo tuve que hacer un tratamiento de estimulación ovárica, pero la verdad es que fue muy bien, y el embrión se implantó a la primera.
¿Cuál es el mejor tratamiento para mí?
Si no sabes qué tratamiento se adapta más a ti, prueba nuestro prediagnóstico online