Desde que nacen, todos los padres estamos atentos al desarrollo de nuestros hijos. ¡Nos encanta celebrar sus pequeños–grandes progresos! porque ¡hace tanta ilusión ver cómo crecen y ganan habilidades!

Además, es importante hacerlo para ver si evolucionan correctamente, y no solo desde los primeros meses sino de forma continuada. El motivo es que hay algunos problemas que hasta los 12-36 meses, que es cuando empiezan la etapa preescolar, no se pueden detectar. Así que conviene hacer un seguimiento y cumplir a rajatabla las visitas de control del pediatra.

De todos modos, no hay que obsesionarse. Hay niños que hablan, gatean y caminan enseguida y otros que van a un ritmo más lento. También influye el carácter, el entorno y los estímulos. Si tienen hermanos mayores, en general aprenden y se espabilan antes. Pero ¿qué ocurre en el caso de los bebés prematuros? ¿Es de esperar que tengan más problemas? ¿Cómo podemos saber si están evolucionando bien?

“La mayoría de los padres de un bebé prematuro tienen mucha más información, porque ha estado en contacto más estrecho con especialistas desde el nacimiento de su bebé y saben que su evolución es diferente a la de otros niños. Pero aún así, siempre quedan dudas y hay un estigma social, porque no se puede evitar hacer comparaciones y si su hijo ha cumplido el año y todavía no camina, sufren porque temen que se vaya quedando atrás”, explica la pediatra Paula Serrano , especialista en Neonatología del Hospital Universitari Dexeus.

En este sentido un dato muy importante es que su desarrollo no es equiparable al de los niños nacidos a término, al menos hasta que alcancen los tres años. Además, hay que hacer un seguimiento adaptado a su edad “real”, que no es su edad cronológica, sino la edad corregida. Si es el caso de tu hijo, puedes calcularla a partir de dos datos: la fecha probable en la que estaba previsto el parto y las semanas transcurridas de embarazo cuando nació. Si estaba previsto que naciera a las 40 semanas y nació a las 28 semanas, hay que restar de 40-28. El resultado son las semanas de prematuridad. Nació 12 semanas antes. Para saber, por tanto, cuál es su edad real hay que restar de “su edad actual” las semanas de prematuridad. Si han pasado 6 meses desde que nació (24 semanas), su edad real no son 6 meses sino el resultado de esta operación: 24 semanas – 12 semanas= 12 semanas, es decir 3 meses. Por lo tanto, para observar si evoluciona bien, hay que tener en cuenta que su ritmo de desarrollo debe ajustarse al de un bebé de 3 meses.

“Es cierto que en el caso de los bebés prematuros extremos, el porcentaje de retrasos madurativos puede ser más alto, por ello existen protocolos propios que incluyen visitas de múltiples especialistas, como neuropediatría, rehabilitación y atención temprana, entre otros. Estas visitas de seguimiento se realizan a través de unas unidades especializadas denominadas Centros de Desarrollo Infantil y Atención Temprana (CDIAT)”, añade Mireia Torres Moliner, también especialista en Neonatología del Hospital Universitari Dexeus. Dependen del Gobierno de cada CC.AA y la atención que ofrecen es gratuita. Pero solo realizan el seguimiento hasta los 5 años.

Si a partir de esa edad existen problemas de desarrollo, el seguimiento ya tiene que hacerse a través de los especialistas que corresponda por separado, no está centralizado. “En nuestro hospital, les hacemos una hoja de ruta para realizar su seguimiento. Cuanto más extremo sea el prematuro -si nació con pocas semanas, muy bajo peso o tiene algún problema de salud añadido- mayores son las probabilidades de que se den trastornos del desarrollo“, explica Paula. “De todos modos, en la mayoría de los prematuros la evolución es bastante buena y si hay algún problema se detecta enseguida”, puntualiza.

“Lo que siempre decimos a los padres es que entendemos su preocupación, pero que confíen en los profesionales, ya que existen muchos recursos y hay protocolos muy claros para ayudar en su desarrollo», añade Mireia Torres. A los dos años aproximadamente, casi todos alcanzan el rango normal. Si tu hijo no lo ha alcanzado, puede necesitar apoyo adicional durante un período de tiempo más largo. Pero no significa que no vaya a progresar. «Lo importante es que estén bajo supervisión de los especialistas”, explica Mireia.

Un aspecto muy importante es que los padres estén muy implicados, “son el principal apoyo”, indica Paula,” porque, por nuestra experiencia, todo es mucho más fácil cuando se trabaja en equipo con los profesionales”. En este sentido “deben saber que hay asociaciones y grupo de padres de niños prematuros que funcionan como una muy buena red social de apoyo, y que permiten intercambiar información y experiencias”, explica Mireia.

En este post exponemos algunos hitos del desarrollo que pueden servir de guía a partir de cuestionarios que se ofrecen a los padres.

Logros del desarrollo infantil por etapas

A los 6 meses

Comunicación
• Hace sonidos agudos y de tono bajo como rugir o gruñir
• Balbucea, hace sonidos como “da”, “ga”, “ba”, “ca”
• Responde a su nombre, voltea y observa

Destreza motora y psicomotricidad fina
• Se sostiene si se le coloca sentado apoyándose hacia adelante con sus manos
• Es capaz de girarse de estar boca arriba a boca abajo
• Coge juguetes los agita, los muerde

Social/individual y resolución de problemas
• Se mete los juguetes en la boca
• Golpe con los juguetes en la mesa o el suelo
• Es capaz de agarrar su pie y, en ocasiones, se lo mete en la boca
• Delante del espejo se rie o hace sonidos o intenta tocar la imagen que ve

A los 12 meses

Comunicación
• Puede realizar dos sonidos similares como “ma-ma”, “pa-pa”, “ba-ba”
• Cuando quiere algo lo señala con el dedo para comunicarlo
• Mira hacia el lugar donde se le dice y realiza ordenes senzillas como “devuelvemelo”

Destreza motora y psicomotricidad fina
• Se sostiene de pie en equilibrio si se le agarra de las dos manos
• Es capaz al estar agarrado de un mueble, agacharse y volverse a poner de pie
• Puede coger pequeños objetos como migas de pan

Social/individual y resolución de problemas
• Sabe donde está un juguete o objeto si se le esconde (por ejemplo, debajo de una hoja o una tela)
• Realiza juegos simbólicos (por ejemplo, peina o da de comer a un muñeca)
• Ayuda en ocasiones a ponerse la ropa metiendo el brazo o las piernas

De los 24 a los 30 meses de edad

Comunicación
• Puede usar correctamente dos palabras como ”yo”, “mi”
• Imita una oración de dos palabras “mama juega”
• Puede identificar señalando con el dedo un dibujo correcto

Destreza motora y psicomotricidad fina
• Pueder dar una patada a un balón
• Puede bajar escaleras de pie con ayuda
• Sabe dar la vuelta a las hojas de un libro sin ayuda

Social/individual y resolución de problemas
• Si quiere algo que no alcanza coge una silla o una caja para subirse encima y alcanzarlo
• Sabe beber de un vaso, come con tenedor
• Imita actividades cotidianas que realizan sus padres, limpiar, lavar…

Asociaciones de apoyo para padres:
Associació de Prematurs de Catalunya
somprematurs.cat/es/
Asociación española de padres y madres de niños nacidos prematuramente
https://aprem-e.org/