A menudo, cuesta encontrar un hueco en la agenda para hacer la revisión ginecológica. Pero es una buena costumbre que vale la pena mantener, ya que permite detectar de forma precoz problemas de salud que pueden pasar desapercibidos. Una de las pruebas rutinarias que incluye este chequeo es la citología. ¡Seguro que te la han hecho alguna vez! Esta prueba requiere la toma de una muestra de células para su estudio. Pero ¿sabes exactamente qué se analiza?, ¿con qué regularidad hay que hacerla? o ¿qué tipo de patologías permite detectar? Si tienes dudas o quieres saber si estás bien informada, compruébalo tú misma a través de este test.

¿VERDADERO O FALSO?

1.- La citología debería hacerse cada año

VERDADERO. Un chequeo anual es la forma más eficaz de diagnosticar de forma precoz un cáncer de cuello de útero. Las sociedades científicas consideran que hacerla cada dos o tres años es suficiente, pero es un tema de debate, porque si se reduce su práctica, tendría que aumentar la de los test para detectar la presencia del virus del papiloma humano (VPH).

2.- Si ese día tienes la regla ¡cambia la fecha!

VERDADEROYa que la sangre puede dificultar la evaluación de toda la muestra. Lo mejor es que hayan pasado al menos 3 o 4 días desde la última regla, Por la misma razón no conviene hacer lavados internos ni utilizar cremas o desodorantes vaginales que puedan alterar el pH de la zona. Y si has seguido un tratamiento tópico por hongos u otra infección, deberás esperar entre 5 y 7 días.

3.- Se recomienda hacerla a partir de los 20-25 años

VERDADERO. De hecho, entre los 16 y los 18 años se aconseja hacer una primera visita al ginecólogo/a para informarte sobre métodos anticonceptivos e infecciones de transmisión sexual (ITS), que son mucho más frecuentes de lo que se cree y a menudo no presentan síntomas. Si eres más joven, pero tienes pareja estable o ya has tenido relaciones sexuales, consulta a tu médico.

4.- Para hacer la citología se extraen células de la vagina

VERDADERO a medias. Normalmente se extraen y analizan células del cuello uterino, no de la vagina, pero en nuestro centro se realiza una triple toma cervicovaginal para analizar células del exterior del útero, del interior del cuello del útero y también de la vagina. Esta toma es especialmente útil en mujeres a las que se les ha extirpado el útero sobre todo por patología maligna o premaligna.

5.- Esta prueba también se conoce por el nombre de Papanicolau o frotis

VERDADEROEl nombre se debe al médico de origen griego que desarrolló inicialmente este método para la detección de células precancerosas del cuello uterino, denominado Georgios N. Papanikolaou.

6.- El objetivo de esta prueba es detectar un cáncer inicial

VERDADERO a medias. El objetivo es detectar cambios celulares que puedan ser indicativos del desarrollo de un cáncer de cuello de útero o derivar en su desarrollo (lesiones precancerosas). Casi todos los cánceres de cuello de útero son causados por el virus del papiloma humano (VPH), que se transmite a través de las relaciones sexuales.

7.- La citología permite detectar otras enfermedades e ITS

FALSO a medias: se pueden detectar infecciones menores (por hongos, trichomonas o bacterias). Pero para la prevención de otras infecciones de transmisión sexual (ITS) es mejor realizar un examen en fresco en la consulta, un cultivo vaginal o test moleculares como la PCR

8.- Si estás embarazada, ¡no debes hacerla!

VERDADERO a medias. Ya que aumenta el riesgo de que se produzca un pequeño sangrado o infección. De todos modos, si te la haces justo los primeros meses sin saber que estás en estado, tranquila porque en esa etapa el cuello del útero prácticamente no se ha modificado y la toma es perfectamente válida para su análisis.

9.- Pueden producirse falsos positivos (de lesiones)

VERDADERO. La regla, infecciones o tomas defectuosas o escasas pueden dar falsos positivos. De todos modos, actualmente el análisis se realiza mediante técnicas de automatización que permiten disminuir las tasas de error.

10.- Puedes sangrar un poco tras la extracción

VERDADERO. Pero estos casos son mínimos. Puede pasar si la zona del cuello uterino ya estaba irritada o se ha producido una pequeña herida o rasguño al tomar la muestra, y lo normal es que la hemorragia se detenga enseguida. También puede ocurrir si se tienen pólipos cervicales o vasos sanguíneos especialmente sensibles o congestionados.

11.- A partir de los 65 años, ya no es necesaria

VERDADERO a medias. Sí, siempre y cuando nunca se haya detectado un proceso maligno genital. Aunque algunas mujeres prefieren seguir haciéndosela. Más allá de los 70 años, si se hacen es por el hábito adquirido.

12.- Es preferible no tener relaciones sexuales con penetración antes y después la prueba

VERDADERO a medias. Se aconseja no tenerlas antes para evitar que pueda producirse un pequeño sangrado que altere el análisis. Después, dependerá de si notas la zona más sensible o la prueba te ha provocado molestias.

13.- Si se detecta un cáncer de útero de forma precoz, tiene buen pronóstico

VERDADERO. El objetivo de la citología es detectar posibles lesiones precancerosas. Algunas de ellas son leves y desaparecen espontáneamente, por lo que solo requieren un seguimiento de control. Y las que son más graves se pueden tratar de forma rápida en la propia consulta mediante cirugía ambulatoria y con anestesia local.

Y tú, ¿ya tienes cita con tu ginecólogo/a para tu revisión anual? Si tienes cualquier duda, ¡déjanos un comentario!