Miles de personas se sumaron el pasado mes de marzo a la 3ª edición de la Endomarch (Endometriosis Worldwide March). Una iniciativa que pretende aumentar la visibilidad social de una enfermedad poco conocida, a pesar de que afecta a 200 millones de mujeres en todo el mundo.
En España, la marcha se ha celebrado este año, por primera vez, en Barcelona, impulsada por la Asociación de Afectadas de Endometriosis de Cataluña (Endo & Cat), y ha contado con el apoyo de los chicos de la 501st Legion-Spanish Garrison y del Festimbal Batucada, que vinieron dispuestos hacer “mucho ruido”. Y desde luego, no pasaron desapercibidos, como muestra el vídeo recopilatorio de la Endomarch 2016, ya que ver a las tropas de asalto de Star Wars bailando frente a la catedral por una buena causa no es algo que suceda cada día (para que luego se diga que a los seguidores de “la fuerza” solo les preocupa la próxima película de la saga…).
La iniciativa, merece todo el apoyo, ya que aunque la endometriosis es una patología benigna, provoca dolor y otros trastornos que afectan a la calidad de vida. Se caracteriza por la presencia de tejido endometrial fuera del útero, habitualmente en la pelvis o los ovarios, aunque puede extenderse a otros tejidos, por lo que puede llegar a comprometer la fertilidad. De hecho, un 50% de las mujeres con problemas de fertilidad tienen endometriosis, y entre un 30 y un 50% de las mujeres con endometriosis tienen problemas de fertilidad (una cifra que aumenta con el retraso de la edad de la maternidad). Por este motivo, es fundamental diagnosticar cuanto antes la enfermedad.
El problema es que no siempre es fácil, porque a veces no presenta síntomas y muchas mujeres asocian el dolor que provoca al síndrome premenstrual o a la menstruación. Por lo que a menudo pasa desapercibida o se diagnostica tarde: la media es de de 7 a 8 años.
Además, para avanzar en su conocimiento y tratamiento, los médicos necesitan mejorar el control y el seguimiento, ya que cada caso es distinto, algo que no pueden conseguir si las mujeres no son conscientes de la enfermedad ni realizan revisiones de control. Por ello, muchos profesionales se han implicado personalmente en esta campaña de sensibilización, como el Dr. Pere Barri, responsable de la Unidad de Endometriosis de Salud de la Mujer Dexeus, y el Dr. Francisco Carmona, jefe del Servicio de Ginecología del Hospital Clínic de Barcelona, que encabezaron la marcha de Barcelona.
Por suerte, cada vez es mayor la respuesta social: el pasado mes de julio, todos los grupos del Parlamento catalán aprobaron por unanimidad las peticiones que presentó la Endo&Cat a la Comisión de Salud, entre las que se incluyen: elaborar una guía actualizada para mejorar la información que, en general, tienen las mujeres y el personal de atención primaria sobre esta enfermedad, recoger datos epidemiológicos, ampliar la formación de los ginecólogos sobre su tratamiento y diagnóstico, promover la investigación y la colaboración con las asociaciones de afectadas, así como garantizar el acceso a las técnicas de reproducción asistida en los casos en que sea necesario.