Se calcula que aproximadamente un 6,5% de los niños que nacen en España son prematuros, según indica la Asociación de Padres de Niños Prematuros (APREM), de acuerdo con las estadísticas del INE. En Cataluña, solo el año pasado, se registraron más de 3.500, según los datos del IDESCAT. Probablemente conozcas algún caso, o tal vez hayas oído hablar. Pero la posibilidad de que le pase a una misma es algo que casi nadie se plantea. Al menos no de entrada, a no ser que surja alguna complicación. Sin embargo, cualquier mujer embarazada puede tener un parto de este tipo, aunque no tenga factores de riesgo, ya que muchas veces ocurren de manera insospechada.
Se consideran bebés prematuros los que nacen antes de la semana 37 de gestación, y aunque hay historias muy distintas y diferentes grados de inmadurez, la mayoría (más del 80%) evolucionan bien. Por suerte, un parto prematuro no es algo frecuente y, en general, los controles que se realizan durante el embarazo permiten detectar las situaciones de mayor riesgo y tomar las medidas necesarias para prevenirlo o, al menos, estar sobre aviso y preparados. Por eso, como indica el Dr. Alberto Rodríguez Melcón, Jefe del Servicio de Obstetricia de Dexeus Mujer, la mejor manera que tenemos actualmente de prevenir un parto prematuro es realizar un buen control del embarazo.
De todos modos, no siempre es posible detectar una causa, aunque sí se sabe que los embarazos en mujeres jóvenes (menores de 20 años) y mayores (a partir de 40) son factores de riesgo. También es más frecuente en las gestaciones múltiples, cuando hay antecedentes de parto prematuro o una conización (extirpación de parte del cuello uterino) o si tienes una malformación uterina. También aumenta el riesgo el hecho de ser fumadora o tener alguna enfermedad crónica. En nuestro centro contamos con una Unidad de Alto Riesgo Obstétrico y una Unidad de Asesoramiento Pregestacional para hacer un seguimiento de control específico en estas situaciones, que requieren una especial atención, con el fin de cuidar de la salud de la madre y velar por el bienestar del bebé desde antes incluso de que se produzca el embarazo, ya que en estas pacientes también ofrecemos asesoramiento para planificarlo con el fin de que se desarrolle en las mejores condiciones de salud materna. Así que, si es tu caso y estás pensando en ser madre, puedes consultar.
Aparte de estas situaciones, durante el embarazo también pueden surgir otros problemas que justifiquen finalizar antes de término una gestación, como la preeclampsia, una enfermedad que afecta a la madre y se debe a un aumento de la tensión arterial, determinados problemas de crecimiento fetal o aquellas gestaciones gemelares que comparten la misma bolsa, pero que por suerte son muy poco frecuentes. En cualquier caso, muchos de estos problemas sí se pueden detectar en los controles que se realizan durante el embarazo. No obstante, es importante que informes siempre a tu ginecólogo/a, sin alarmarte, de cualquier irregularidad.
También es importante que mantengas una buena higiene dental y que acudas al dentista para realizar una revisión en el primer trimestre del embarazo. Existe una relación entre procesos infecciosos bucales y el riesgo de tener un parto prematuro. También deberás consultar si presentas síntomas de infección de orina, ya que muchas de estas infecciones pueden generar irritación uterina y provocar contracciones.
Asimismo, puede que hayas oído que este tipo de partos son más frecuentes en mujeres que recurren a las técnicas de reproducción asistida, y es cierto. Pero la causa no son las técnicas en sí mismas, sino el hecho de que muchas de estas mujeres tienen una edad avanzada para ser madres, o problemas de fertilidad que también aumentan el riesgo. Hasta hace poco, además, entre estas pacientes era más habitual tener gemelos o mellizos, porque a veces en los tratamientos de fecundación in vitro (FIV) se transfería más de un embrión. Sin embargo, actualmente y gracias a los avances en el cultivo y la selección embrionaria, se suele transferir solo un único embrión por ciclo a estas pacientes, lo que evita las gestaciones múltiples y otras complicaciones asociadas, así como el riesgo de que el parto se adelante por esta causa.
De todos modos, cada parto es distinto, y cada mujer y sus circunstancias también, por lo que el hecho de que conozcas a alguien haya tenido alguno de estos problemas y se le haya adelantado el parto no significa que a ti te vaya a pasar lo mismo. En realidad, muchas mujeres que han tenido partos prematuros no tenían ningún factor de riesgo previo, y, al revés, mujeres con factores de riesgo han acabado dando luz a niños a término.
Esperamos que esta información te haya resultado útil y, sobre todo, no te preocupes especialmente por este tema. Lo más importante es que sigas las revisiones de control y te dejes guiar en todo momento por el equipo médico. Y, si tienes dudas, consulta a tu ginecólogo/a, o puedes enviarnos un comentario.